Perry Farrell demanda a sus ex compañeros de Jane's Addiction

A menos de 24 horas de haber sido demandado por sus ex compañeros de Jane's Addiction -Dave Navarro, Stephen Perkins y Eric Avery-, el vocalista y fundador de la banda, Perry Farrell, presentó su propia demanda contra ellos, acusando agresión, acoso, incumplimiento de contrato y otros cargos (vía Variety).

Lejos de tratarse de una contrademanda, el reclamo legal de Farrell fue presentado junto a su esposa Etty Lau Farrell y su compañía de giras, y apunta directamente a los tres músicos que lo acompañaron en Jane’s Addiction hasta su disolución en septiembre de 2024.

El conflicto tiene su origen en la presentación del 13 de septiembre de 2024 en Boston, que terminó siendo el último show de la banda. Allí, Farrell empujó y golpeó a Navarro sobre el escenario, lo que habría derivado en una pelea tras bambalinas, con la intervención de Avery. Después de esa noche, la banda canceló el resto de la gira y se separó.

Qué dicen las demandas

La demanda inicial presentada por Navarro, Avery y Perkins exige 10 millones de dólares por daños y acusa a Farrell de agresión física, angustia emocional, negligencia e incumplimiento contractual. En respuesta, la presentación legal del cantante afirma que Navarro lo agredió a él y a Etty Lau Farrell en backstage, y que sus compañeros lo dejaron fuera de toda decisión sobre la gira.

"Perry fue tomado por sorpresa al no permitírsele votar ni defender su postura para continuar la gira. Luego, fue públicamente culpado por Navarro, lo que destruyó su reputación y le causó un daño irreparable”, expresa un comunicado enviado por su abogado al sitio Consequence.

Farrell también denuncia que sus compañeros se negaron sistemáticamente a bajar el volumen de sus equipos, lo que le provocó una tensión creciente durante los shows. Según su entorno, el cantante no quería cancelar la gira, pero fue forzado a hacerlo y quedó como único responsable ante el público y los fanáticos.

A pesar de la ruptura total del grupo y el conflicto legal que ahora escala en tribunales, Farrell asegura que su compromiso con el legado de Jane’s Addiction "permanece intacto" y que buscará "formas de asegurar la rendición de cuentas y preservar el impacto positivo de la banda en la música”.