
De resoluciones ilegales a un virtual estado de sitio, ¡Bullrich se tiene que ir!
El oficialismo hizo una campaña que incluyó amenazas, el reforzamiento de las atribuciones represivas del Estado para perseguir opositores y una arenga de demonización antiprotestas para justificar una cacería policial que dejó más de 100 detenidos, decenas de heridos y un fotógrafo en estado crítico.