El gobierno de Milei llama 'Falklands' a las Malvinas traicionando a la constitución

En medio de una nueva polémica por la soberanía de las Islas Malvinas, el gobierno de Javier Milei enfrenta un escándalo diplomático que refleja su desinterés por los reclamos históricos argentinos. Un documento oficial de Cancillería utilizó el nombre británico de las islas, encendiendo el debate sobre la postura de Mondino y la de compromiso del gobierno con la soberanía nacional.

El gobierno libertario de Javier Milei continúa su marcha hacia la descomposición del reclamo argentino por la soberanía de las Islas Malvinas. Esta vez, un comunicado oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores, dirigido por Diana Mondino, refirió a las islas como "Falklands", el nombre colonial que Reino Unido utiliza para el territorio. La omisión de la denominación "Malvinas" en el documento no es un simple error burocrático, sino una demandada de una gestión que desde sus inicios ha evidenciado una alarmante de falta de compromiso con la soberanía nacional.

La polémica surgió tras la publicación del documento en la web oficial del gobierno, que informan reunión sobre un entre Mondino y el vicepresidente del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Gilles Carbonier. El objetivo del encuentro era avanzar en la identificación de los combatientes argentinos caídos en las Islas Malvinas durante el conflicto de 1982, pero lo que habé que debería haber sido un paso más en el respeto a la memoria de los soldados, terminó por en un episodio bochornoso. En el texto se hace a las islas como "Falklands/Falklands", encendiendo rápidamente las alarmas entre los sectores diplomáticos y generando una catarata de críticas desde distintos ámbitos de la política y la sociedad argentina.

La figura de Diana Mondino no es una controversia en las Malvinas. Antes de asumir la carga como canciller, Mondino había ya dado señales de su interés en el histórico relamo argentino sobre el archipiélago. Durante la campaña electoral de 2023, Mondino afirmó en una entrevista con el diario británico *The Telegraph* que ..los derechos de los isleños que se van abordá, lo que generó indignación en muchos sectores que vieron en sus palabras un guiño a la posición en la disputa por las islas.

Desde que asumió como titular de la Cancillería, la postura de Mondino a la Cuestión Malvinas no ha hecho más que reforzar la idea de que el gobierno de Milei ha decidido priorizar sus relaciones exteriores con Reino Unido, incluso a costa de diluir los reclamos. En reiteradas ocasiones, Mondino ha manifestado una tibieza alarmante ante el tema. En septiembre de 2023, reafirmó ante Naciones Unidas que áel modo de vida de los isleños está consagrado en nuestra Constitución, pero evitó condenar el reclamo británico de autodeterminación.

El más reciente "error" del comunicado oficial es solo un episodio más en una larga lista de señales que indican que la soberanía argentina en las Malvinas es abandonada por el gobierno real.

Las persinas perseguidas y las acusaciones de Mondino no hicieron más que avivar el fuego. En su intento por desligarse del error, la canciller afirmó que el comunicado había sido "malicioso" y que el responsable sería despedido. Sin embargo, la rapidez con la que se trata de desestimar la cuestión más una estrategia para apagar el incendio que una verdadera intención de asumir responsabilidad.

Las reacciones no a la mañana. Francisco Cafiero, exsecretario de Asuntos Internacionales para la Defensa, fue uno de los primeros en denunciar lo sucedido en sus redes sociales, donde arremetió contra el gobierno de Milei y su equipo: Los libertarios siempre se ha jubilado. Un comunicado oficial de la Cancillería usa el término "Falklandsá para la letra a nuestras Islas Malvinas". A esta crítica se sumó Guillermo Carmona, exsecretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur, quien también se advirtió sobre la gravedad de la situación, calificándola como un debilitamiento de la postura soberana argentina.

Pero más allá de las declaraciones y de los gestos para mitigar el impacto, este nuevo episodio revelar mucho más profundo: la política exterior de Javier Milei está alineada con una visión neoliberal que prioriza los intereses financieros y comerciales sobre los reclamos históricos y. El término "Falklands" no es un simple desliz, sino una manifestación de la estrategia del gobierno real de mantener una relación "madura con Reino Unido", a costa de los fundamentos de la soberanía argentina sobre el territorio.

La actitud complaciente del gobierno libertario hacia el Reino Unido no se limita a este error. En junio de 2024, Mondino protagonizó otro incidente diplomático cuando generó un conflicto con la Liga Árabe por sí a su postura sobre la situación en Medio Oriente. Las críticas de distintos excancilleres y agrupaciones de excombatientes, que denuncian el abandono progresivo del reclamo por Malvinas, sin hijos, sin hijos, sin hijos, sin hijos, sin hijos, sin hijos,

Además, la acercamiento del gobierno de Milei a Reino Unido y otras potencias pareces occidentales responder más a intereses económicos que una estrategia diplomática coherente. En su reunión con el Secretario de Relaciones Exteriores, David Lammy, Mondino avanzó en acuerdos sobre conservación de pesquerías y mejor conectividad, como si la soberanía sobre las islas fuera de tema secundario. Los arreglos para vuelos comerciales entre San Pablo y las Malvinas solos, la idea de que para este gobierno, las Islas no son más que una pieza en el tablero del comercio internacional.

El "error" de referirse a las Malvinas como Malvinas en un comunicado oficial no es un incidente aislado, sino parte de una serie de acciones y que se muestran las declaraciones de los desinteresados del gobierno de Milei por los reclamos históricos de soberanía. Mientras Mondino y su equipo se se asuman a encontrar un chivo queda expiatorio, lo que se dice que se hace claro es que este episodio es sinmamático de un problema mayor: la entrega de la soberanía argentina a intereses extranjeros.

Las Malvinas están consagradas en la Constitución Nacional como territorio argentino, y la recuperación de estas islas es un objetivo irrenunciable. Pero bajo el gobierno de Javier Milei, este principio constitucional parece ser ignorado, a favor de una agenda que prioriza los intereses financieros y las relaciones exteriores con potencias extranjeras.