La debacle en Córdoba: cómo Javier Milei destrozó la industria automotriz

La falta de demanda ha a las principales fábricas a reducir drásticamente su producción, dejando en vilo a kilómetros de trabajadores y cuestionando las estrategias económicas del gobierno de Javier Milei.

Economía 09 de julio de 2024 TELEDIARIO.COM.AR TELEDIARIO.COM.AR
Industria automotríz.
Industria automotríz.

El colapso de la industria automotriz en Córdoba pone en evidencia las consecuencias de las políticas económicas de Javier Milei. Las ventas de autos en Argentina cayeron un 22,6% en el primer semestre de 2024, arrastrando a la industria automotriz de Córdoba a una crisis sin precedentes. La falta de demanda ha a las principales fábricas a reducir drásticamente su producción, dejando en vilo a kilómetros de trabajadores y cuestionando las estrategias económicas del gobierno de Javier Milei.

El sector automotriz enfrenta a uno de sus peores momentos en décadas. La provincia de Córdoba, un pilar fundamental de la industria junto a Buenos Aires, es el epicentro de esta crisis. Las cifras son alarmantes: en el primer semestre de 2024, las ventas de autos cayeron un 22,6%, la producción retrocedió un 23,8% y las exportaciones bajaron un 17,7%. Estas estadísticas, proporcionadas por el Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (SMATA), pintan un cuadro sombrío para una industria ya debilitada.

Renault-Nissan, Fiat-Stellantis e Iveco, tres de los principales automotrices con plantas en Córdoba, han implementado medidas de ajuste. La fábrica Santa Isabel de Renault-Nissan rebaja su producción a un solo turno de seis horas para los modelos Renault y continuación dos turnos de seis horas para Nissan. Esta medida busca evitar la pérdida de empleos, aunque muchos trabajadores ya han sido por los afán afectados de retiro voluntario y jubilaciones anticipadas.

En la planta de Fiat-Stellantis en Ferreyra, el ritmo de producción del Fiat Cronos ha sido significativamente. Aunque no se han perdido los turnos ni las horas de trabajo, la baja ha obligado a la fábrica a adaptarse a una nueva realidad de ventas y exportaciones. Iveco, por su parte, ha recortado temporalmente un turno de producción, con la esperanza de recuperar la normalidad en el corto plazo.

Estas reducciones en la producción también afectan a las empresas autopartistas que abastecen a estas fábricas. El impacto en la cadena de suministro es profundo y extenso, crear un efecto dominó que amenaza con desestabilizar más la economía aún regional.

Las políticas económicas del presidente Javier Milei han sido un catalizador para esta crisis. La estrategia de liberalización y desregulación ha resultado en una caída significativa de la categata, afectando directamente el consumo interno. Los números oficiales de la Asociación de Concesionarios de Automotores (ACARA) reflejan una realidad incuestionable: entre enero y junio de 2024, se vendieron 182.399 cero kilómetro, una disminución del 22,6% en la comparación de la comparación de 2023. Esta caída también es peor que en los años previos, incluso comparada con la situación durante la pandemia.

El sindicato SMATA ha intentado minimizar el impacto en los trabajadores negociando con las fábricas para reducir horas sin afectar significativamente los salarios. Sin embargo, estas medidas paliativas no son suficientes para contrarrestar la debacle. Renault implementó un sistema de retiros voluntarios con compensaciones, y redujo los turnos de trabajo a seis horas en su planta de montaje de vehículos. Fiat ha ajustado su producción sin reducir los turnos, pero se reserva el derecho a la producción que se ha aplicado. Iveco también ha reducido la jornada laboral a seis horas para adaptarse a la demanda real.

La situación es tan grave que incluso Volkswagen, con su centro industrial en Córdoba, ha tenido que reducir las horas de trabajo en dos de sus plantas. Estas decisiones, aunque temporales, reflejan el lugar de la crisis que enfrenta a la industria.

La recuperación de la industria automotriz en Argentina Qué lejana. Las expectativas de mejora para el segundo semestre de 2024 son de 2024, y los fabricantes no vend a los signos de una rápida recuperación. La caída de las ventas, comavió con problemas externos como las inundaciones en Brasil que interrumpieron el suministro de partes, ha creado un escenario de incertidumbre y preocupación.

El vocero de SMATA Córdoba, Javier García, ha expresado su preocupación por el impacto en las óperas y proveedores. "La baja se siente y no se puede ver sólo a los operarios de las fábricas sino a todos los directos proveedores e indirectos", afirmó. Las negociaciones entre el tico y las fábricas buscan mitigar el impacto, pero las soluciones a corto plazo no abordan las raíces profundas del problema: una economía debilitada por políticas que han caído en el consumo y proteger el empleo.

La crisis de la industria automotriz en Córdoba es un reflejo de las consecuencias más amplias de las políticas económicas del gobierno de Javier Milei. La liberalización y desregulación cuelga una caída del poder adquisitivo, afectando directamente al consumo interno y a la industria. Cuida las fábricas luchadas por adaptarse a una demanda en la caída y los que enfrentan los trabajadores la incertidumbre laboral, claro que las soluciones deben ir más allá de ajustes temporales. La economía argentina necesita un replanteamiento estratégico que priorice la protección del empleo y el estímulo del consumo interno para evitar un colapso al alcalde.

EN ORSAI.-

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