Nada que discutir: huelga general hasta la derogación, contra la represión y por las luchas obreras

El decreto declara entre “esencial” y “trascendental” a más de 60 actividades. Las esenciales tendrán que garantizar el 75% de la prestación en caso de huelga, las segundas, las trascendentales un 50%.

Sindicales / GremialesHoyTELEDIARIO.COM.ARTELEDIARIO.COM.AR
Marcha y movilización en Tierra del Fuego para defender la industria y el empleo.
Marcha y movilización en Tierra del Fuego para defender la industria y el empleo.

La existencia misma del movimiento obrero ha sido puesta en discusión al eliminar virtualmente el derecho de huelga mediante el decreto 340/25 emitido hoy por el gobierno de Milei. Esto es así porque comprende a prácticamente el 70% de las actividades que abarcan los sindicatos, retomando la letra del nefasto DNU/70, cuyo tramo laboral fue suspendido por la Corte Suprema. ¿Tendrá la anuencia hoy para hacerlo? Lo que es seguro es que es la primera consecuencia de la primera elección en la que Milei obtiene una victoria, la de CABA, aunque lo haya votado el 16% del padrón. El mandato, como se ve no viene de la legitimidad de las urnas, el mandato viene de Amcham y toda la burguesía que reunida le dijo “queremos ver las reformas de fondo” para alguna inversión aunque ya tengan el RIGI y todas sus prebendas coloniales.

El decreto declara entre “esencial” y “trascendental” a más de 60 actividades. Las esenciales tendrán que garantizar el 75% de la prestación en caso de huelga, las segundas, las trascendentales un 50%. Es evidente que la medida de acción gremial se transforma en inútil, porque su función es interrumpir la producción, el comercio o el servicio en el que el trabajador presta funciones. Y es muy claro que con esos porcentajes andarían las escuelas, el transporte o las fábricas, ni hablar los comercios u otros servicios.

La disposición de esencialidad elimina la tradición de las guardias mínimas en la salud que siempre cumplen los trabajadores para obligar al 75% de atención. En la medida que la descripción del decreto en esta calificación va desde la educación de todos los niveles hasta la producción, transporte y comercialización de combustibles, de energía eléctrica, las comunicaciones en su enorme radio, lo mismo que internet, la aeronáutica de todo tipo, como los servicios aduaneros y la navegación fluvial y marítima, para esas actividades el derecho de huelga queda prohibido.

En las trascendentales está todo, desde transporte de materiales de construcción hasta bancos, industria alimenticia, el transporte terrestre y subterráneo de personas y/o mercaderías, las actividades industriales alimenticias y las de tipo continuo como aluminio o siderurgia, química o cementera, los servicios hoteleros (nótese este desvarío), el comercio electrónico y cualquier bien o servicio exportable (nótese lo que esto puede abarcar).

Pero por si acaso alguna actividad se les escapó forman a través del decreto una “Comisión de Garantías” que puede calificar como esencial o trascendente cualquier actividad que lo considere.

Hay que decir lo obvio. Milei liquida el derecho de huelga. Se trata de un paso trascendente en la dirección de una dictadura dentro de la democracia. Cuando hemos definido un régimen de fuerza contra los trabajadores, de poder personal, basado en una democracia de infantería como la que vemos actuar todo los miércoles o con el envío de tropas por parte de Bullrich a Tierra del Fuego en una intervención antifederal en oportunidad del paro provincial allí, nos referimos a este derrotero que hoy se complementa con el decreto 340/25 de prohibición del derecho de huelga.

Obviamente el Congreso debería voltear este decreto mediante una ley que lo derogue, pero se trata del mismo cuerpo que acaba de no dar quórum para el aumento a los jubilados o la moratoria, mientras la podrida corrupción en el PAMI les niega los remedios. Es evidente que por ahí no pasa la cuestión como pasó la derogación del DNU/70 que le ha dado vida a las atrocidades de todo carácter del gobierno de Milei. Como le dijimos oportunamente a la burocracia de la CGT en persona desde el bloque del Frente de Izquierda, esto lo volteamos en la calle los trabajadores o no lo voltea nadie y así fue.

La suspensión por parte de la Corte fue parte de las excusas para el pacto colaboracionista que maniató al movimiento obrero frente a la Ley Bases y omitió toda acción sindical central hasta el 9 y 10 de abril, una medida aislada sin continuidad alguna.

El punto, con todo es que estamos ante una nueva ofensiva del gobierno facholibertario con los techos paritarios y el agravamiento de la ofensiva contra los trabajadores en toda la línea que entraña el rescate del FMI ante la bancarrota del Banco Central. Un rescate para un plan aguantar hasta octubre que no viene solo, los cierres de empresas se agravan día a día, el deterioro de salarios y jubilaciones igual, la flexibilización y los despidos de hecho, igual. El decretazo anti huelga sale al cruce de dos cosas, las mencionadas exigencias del imperialismo y la burguesía local y por otro lado la emergencia de luchas obreras que pueden ser la punta del iceberg de la bronca obrera, parte de la cual, de manera confusa, sin dudas se expresó en la abstención electoral aunque haya muchas causas y sectores sociales diversos en esa actitud repetida ya en seis elecciones. Pero lo más importante que está ocurriendo es la huelga fueguina, la rebelión de los choferes contra la paritaria de hambre de Fernández, el parazo descomunal de la docencia bonaerense de la mano de la FEB y los Sutebas combativos contra la paritaria miserable de Kicillof/Baradel desafiando la conciliación y las amenazas, el paro y movilización de la docencia universitaria y los no docentes. Morvillo se movilizó a La Plata a los 84 días de la ocupación mientras otras dos gráficas cerraron. Los piqueteros movilizaron 10 mil compañeras y compañeras a Trabajo hace una semana. Esto se calienta por abajo.

Vienen por todo, es ellos o nosotros, los trabajadores. Es claro que la respuesta al decretazo, acompañado hoy por una brutal represión a los jubilados y a la prensa, con decenas de heridos y detenidos, como al despliegue de tropas en Tierra del Fuego corresponde al movimiento obrero en su conjunto. Impulsemos asambleas, plenario de delegados, exijamos un Congreso de Delegados de todos los sindicatos mandatados por las bases para discutir la inmediata reacción. No al colaboracionismo de la burocracia sindical. Paro ya y plan de lucha hasta la huelga general. Es ahora.

PRENSA OBREARA.-

Últimas noticias
Te puede interesar
Ranking de noticias